Aguijones de mantarraya
De repente, nada más me lo dijo, como la cosa más normal del mundo, como si yo no lo conociera. Casi sin tristeza. Lo enterraron el martes.
“Sabe qué? Su abuelo una vez me había regalado unos aguijones de mantarraya, todavía los tengo. “
Me acuerdo cuando me explicó como funcionaban: tienen un montón de dientecitos vueltos hacia atrás entonces cuando se meten, se quedan pegados y rompen la carne. Ahora que lo pienso, más o menos así son las personas que uno conoce y quiere, se quedan pegados y cuando se van rompen la carne.
4 Comments:
es cierto
así es la gente que uno quiere
duele
mierda pietro, nos diste duro. desgarramiento emocional.
rajado Pietro.
COmo la mantarraya.
*ani se pone a llorar*
cuando uno está lejos estos textos llegan más.
Post a Comment
<< Home